8 de septiembre de 2010

CARTA III

TORMENTOS DE LA SANTISIMA VIRGEN.
(Cada flor una puñalada en el corazón)

Estimado amigo cristiano si eres de los no creyentes en la virgen, entiende las referencias a ella como hechas a dios padre.

En mi 2ª carta te propuse analizar el cuento de Avaricia, Botín y demás hijos de Palomo y María.

Lamentablemente, la historia de lo que ocurre en esa isla en un simplificación de lo que ocurre en la Tierra. Los habitantes del primer mundo, unos pocos en mucho mayor grado que el resto, nos hemos apropiado de las riquezas del planeta, minerales, agua, tierra, energía, descubrimientos científicos, etc. condenado al resto de la humanidad, a sufrir hambres, enfermedades, guerras y muertes demasiado prematuras.

Si como creéis los cristianos dios es un buen padre que creo la tierra y todo lo que hay en ella para el disfrute de sus hijos, es de pensar que las riquezas que puso en el mundo son para todos sus hijos, y no para que unos pocos se apropien de lo que es necesario a sus hermanos para una vida digna. Ese dios padre debe sufrir enormemente viendo como sus hijos mueren entre grandes sufrimientos por la avaricia de sus hermanos. Para mayor escarnio los autores de este ultraje son mayoritariamente cristianos, a quien le ha sido revelada “la verdad”.

De existir la virgen, madre de todos, uno de los mayores dolores que debe sufrir son las celebraciones, ofrendas, y regalos de los que es objeto tanto ella, como dios, y los innumerables santos.

Ponte en el lugar de una madre, que enterrada en coronas, , flores y todo tipo de bienes materiales ve a sus hijos morir de hambre y miseria, imagina su dolor, su agobio, su desesperación, viendo crecer las ofrendas con las que esos depravados intentan lavar su conciencia y comprar favores. ¿Qué debe sentir esa madre cuando la entierran en flores?, ¿ cuanto sufrimiento le causan cada una de las coronas y joyas con la que disfrazan sus imágenes?. Flores, joyas y ofrendas que apestan a muerte, la muerte de muchos millones de sus hijos. En eso consisten las numerosas ofrendas que sufre la pobre virgen, cuya mejor invocación es la de virgen de los dolores. Ofreciendo riquezas a imágenes, a ídolo tratas a tu  virgen como un político corrupto mas que se vende por un poco de adulación y de dinero.. 

Cada flor que se lleva en ofrenda a la virgen es una puñada en su corazón, la virgen en la que tu crees no quiere ofrendas florales ni de ningún tipo, si la solidaridad entre iguales, si que abandones el pecado que según las enseñanzas de los padres de la iglesia veas la propiedad privada como un pecado, que mientras un ser humano sufra hambre y miseria tu te estas condenando si no haces todo por remediarlo, lee los evangelios y olvida las interpretaciones interesadas de la curia, lo que te espera cuando mueras según dios  el evangelio de Mateo cap. 25, 31-46 “…..Entonces dirá también a los de la izquierda: 'Apártense de mi, malditos, vayan al fuego eterno, preparado para el diablo y sus ángeles porque estuve hambriento y no me dieron de comer, sediento y no me dieron de beber, era forastero y no me hospedaron, estuve desnudo y no me vistieron, enfermo y encarcelado y no me visitaron'. Entonces ellos le responderán: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento o sediento, de forastero o desnudo, enfermo o encarcelado, y no te asistimos?’ Y él les replicará: 'Yo les aseguro que cuando no lo hicieron con uno de aquellos más insignificantes, tampoco lo hicieron conmigo’….

Cuando llegue el momento de una celebración religiosa ponte en el lugar de un padre o una madre que ve morir y sufrir a sus hijos, y piensa como recibirias regalos y ofrendas que valen la vida de tu hijo. Piensa a quien beneficia esas ofrendas, y celebraciones. Y por supuesto actúa en consecuencia, si no lo haces por tu salvación hazlo por esa madre y padre a los que tanto dices amar.


Antes de despedirme manifestarte mi alegría de que dentro de los pocos votos emitidos en la encuesta del blog, algunos cristianos piensen que en el juicio final JUAN PABLO II será enviado al fuego eterno. Mi alegría no es por la condena, no me gustan para nada los juicios ni las condenas, mi alegría es por la salvación de esos seres que empiezan pensar críticamente y a tomar conciencia de lo que es bueno y de lo que es malo, conciencia propia no impuesta por jerifaltes y mandatarios movidos por intereses poco fraternales.

Atentamente.